- ATENCIÓN - ATTENTION - ACHTUNG - (LADRILLO, BRICK) No sigas si no tienes tiempo.
Bueno, vengo del circuito de Almería, en el que he compartido trazado con mis compadres totaneros y Llanero, dentro del grupete ducatista que nos ha hecho el amigo Josema de ISK, dejandonos al mejor monitor, Osito.
La mañana no prometía nada, llegamos al circuito casi de noche (7,40 a.m) y no había ni cristo (esa puntualidad, Josema… 
), por el camino nos había llovido y en el lugar había unos nubarrones de tres pares de cojones.
Primera tanda y la ley de Murphy se cumple. El asfalto está recién echado y tiene algo de humedad. Osito parece dispuesto a darnos caña y ya desde el principio pone alto el listón (para mis habilidades, claro). El trazado es muy bonito pero el maricón del Osito me llevaba con la lengua fuera. La primera impresión es:
“Vaya una puta mierda de moto, la que he liado cambiando mi Monster con lo bien que iba yo montado en ella, más feliz que unas pascuas y me ha dado por complicarme la vida”
La moto tiesa como un palo, me cuesta un disparate moverla de un lado para otro, el embrague me patina pues esta algo gastado, las muñecas me duelen horrores, las rodillas, los muslos, la moto parecía un potro de tortura. Para colmo como he engordado unos quilitos no había cojones a menearme con el mono puesto.
Con este panorama, he terminado las primeras vueltas desolado, acordandome de mi S2R, del dia que nos conocimos, de nuestros inicios y lo felices que éramos juntos.
Mis amigotes al verme el careto me han animado. Con los consejos de Osito intento cambiar de actitud. Me subo en la 999R de KuKur y veo que su tija está 3 centímetros más alta que la mía! Con razón se me han puesto los brazos y las muñecas como las de un pajillero loco. “Bueno, siempre le podremos echar la culpa a la tija”, he pensado.
La segunda tanda no es mucho mejor, Osito había venido decidido a hacerme sufrir. Entre él y el cabrón de Llanero que lo picaba me llevaban frito! Mientras los maldecía y me juraba en arameo no volver a emocionarme tanto la próxima vez que decidiera cambiar la moto, las paso canutas. Me entran unos sudores de la muerte y las piernas me tiemblan, las estriberas regulables están en la posición más alta, y bastante retrasadas. Menos mal que se me había ocurrido ir al WC antes de salir de casa porque de la fuerza que hacía con las patas hubiera manchado los calzoncillos nada más hacer la primera frenada.
Bueno, ya he tocado rodilla, me he soltado un poco pero no logro cogerle el tono a la moto. Voy agarrotado y me quedo siempre el último del grupo. Con la Monster era más fácil.
La tercera tanda, ya solito (creo que era la tercera), me lo tomo con más calma e intento fijarme en las trazadas. Voy más desahogado, me siento poco a poco mejor, pero claro, esto no podía durar mucho. Pierdo el tornillo de la palanca de cambios al hacer una reducción, justo cuando Osito iba a filmarme con la cámara. Me escapo por los pelos de hacer el pardillo. Pienso en montar la moto en la furgoneta…
Después de ir “mendigando tornillos” por el paddock, entre Didier y Llanero me resuelven el problema. Ya de paso le miro la presión de las ruedas. En frío delante 2.7 y detrás 2.8. Didier alucina. Le quitamos presión.
Osito casi me tiene que llevar arrastrando para que salga a la pista. Parece que con el depósito más vacío y menos presión en las ruedas voy mejor, ya inclino más la moto y la levanto al salir de las curvas con más alegría. “Debo estár volando”, pienso, justo cuando me pasa una gsx-r 1000 follada, sin ni siquiera saludar.
Me empiezo a divertir. Voy buscando la trazada y aunque el profe diga lo contrario, para mi que lo hago de puta madre. Inclino bien, toco con la rodilla como referencia, me descuelgo… joder, esto empieza a funcionar! Cuando me voy a dar cuenta estoy haciendo los pasos por curva con una seguridad antes impensable en la Monster, la moto va absolutamente fija, la confianza en la rueda delantera es total (o casi) y… ¡ME DIVIERTO!
Me lo empiezo a pasar de miedo, tengo mis piques con mi compadre Sobejano. Le aguanto la rueda, voy más rápido que él en algunas zonas del circuito (VALE EL LLEVA UNA HORNET, Y QUÉ!?), mantenemos un duelo durante unas vueltas que me deja una sonrisa que no me cabe debajo del casco (me habrá grabado Osito ahora??), sigo tirandole y mis sensaciones dan un giro de 180º respecto a las primeras. ¡Qué bien va ésto!
La última tanda intento comprobar si lo de antes había sido efímero pero no, me lo vuelvo a pasar teta encima de la moto, el circuito me encanta. Tiene curvas pa tos lo laos, ciegas dos, enlazadas, rápidas, ángulos, en subida, bajada… lo hago TODO menos las rectas en una marcha, freno muy poquito (claro a la velocidad que iba no hacía mucha falta) y dejo la moto correr… anda, será ésto lo que llaman ducatear? :crazy2:
Qué bien me lo he pasado, es el circuito con diferencia que más me ha gustado de todos en los que he estado. La moto se ha portado de puta madre salvando el embrague y algo los frenos, así que me he quedado contentísimo con el cambio. Tengo que ver cómo irá subiendole la tija.
Y poco más que decir, gracias Osito por tener paciencia con nosotros y conmigo en particular, a mis compinches por venir, a Llanero por ayudarme a recuperar mi tornillo y a todo el mundo.
Un día redondo!! :smitten:
