¡Buenas gente!
¡Vengo a dejaros las impresiones que saque sobre la Diavel, espero que os gusten!
Había quedado a las 4 de la tarde en Ducati Corver, mientras me esperaba que me atendiera el caballero, una Diavel Dark me robo una mirada, que se convirtió en unos 10 minutos mirándola hasta que me llamaron para atenderme. El chico cortésmente me hizo firmar los papeles de rigor y tras ello saco una Diavel color amarillo chillón, que para nada le hacía justicia comparándola con la Dark que había a unos pasos.
Me explica brevemente los mecanismos más básicos de la moto, no tiene mucho misterio, parar y encender, cambiar los mappings y poco más, la sacamos por la puerta y me enfundo a lomos de ese imponente bicho. Vuelve a sorprenderme lo cómoda que es, y me pregunto cómo ira mi novia de tras, por lo que parece ira bastante bien, pruebo a cambiar los mappings para situarme, me regulo los retrovisores, casi me atropella una anciana embobada mirando no sé qué, y decido que es hora de ponerse en marcha, precavidamente acelero, salgo a la calzada y justo cuando me esboza una sonrisa me paro porque se pone rojo el semáforo, sigo mirando la moto, aunque me parece un muy grande y me pregunto si costara mucho de llevar o de conducir, me impone mucho respeto, se pone verde y giro a la derecha, no me conozco Barcelona y tengo una orientación de pena, así que iré Balmes arriba y luego abajo a ver qué tal, cada vez me voy haciendo más al tacto de la moto, me va pareciendo más ágil y se mueve elegantemente por las calles de BCN, no parece que lleve 239 kilos entre las piernas, cada vez se me hace más llevadera, hacia 4 años que no cogía una moto pero me hice con ella de seguida, una delicia.
Después de un corto paseo de 15 minutos, se enciende la reserva… no sé cuánto puedo hacer con ella así que decido volver por si acaso, estando en la otra punta de Balmes, a todo esto que en un semáforo se para un chico de mi edad con una Z750 en blanca a mi derecha, y otro chico con una “cosa” con muchas “R’s”, empiezan a hacer mugir sus motos ante la pasividad mía sobre sus palabras tipo “Vaya tanque tío”, “Con eso no podríamos entrar a circuito” y tonterías similares, el caso es que además en algunas cosas tenían razón, desde mi punto de vista la diavel no está hecha para circuito, eso no quita que no te puedas meter con ella, pero bajo mi punto de vista es una moto muy peculiar, que requiere cierta cabeza, y bajo ningún concepto la veo para estrujarla en un circuito, volviendo al tema, el semáforo se hace eterno, se está a punto de poner verde como indica el parpadeo del semáforo de peatones y decido poner primera, a lo que los chiquillos responden con más mugidos de sus motos, augurando que van a salir partiendo la pana, efectivamente, se pone verde y pegan el gran acelerón para después…pegar el gran frenazo ante el siguiente semáforo, jajaja
En fin llegamos al siguiente semáforo, y empieza la ronda dos de comentarios absurdos, yo a lo mío, miro la moto, toco los mandos, cambio de mapping, la verdad es que el cambio es más rápido de lo que me esperaba, apenas 2 segundos ya ha hecho el cambio, tengo que probarlo en marcha, a ver qué tal, la vueltecita me ha sabido a muy poco, y es una pena que tenga que volver, esta moto no se puede probar por BCN, en fin con el grito estrambótico de los dos descerebraos pongo el mapping urbano, se pone verde y abro gas a fondo, pase tres semáforos en verde para mi asombro, increíble el empuje que tiene, llegue al cuarto semáforo decidió a probar los frenos, frenan! Y mucho! En apenas estaba parado, con un control y un tacto sublimes que no había probado nunca, a los segundos llegan la Z y la “RRRRR” esta vez pude admirar tranquilo la diavel ya que no hubo comentarios idiotas en este semáforo.
La sensaciones que me deja esta moto son inmejorables, tanto en comodidad para el piloto, a falta de que se suba mi novia y opine que tal, aunque me da la impresión que la encontrara muy satisfactoria, me he sentido muy a gusto llevándola, el tema de los mappings es muy interesante, aunque solo me atreví a probar a fondo el básico, es muy ágil para el mastodonte que parece a simple vista, a falta de poder curvear un poco, tiene pinta de portarse bien en curvas, el embrague iba un poco duro, aunque supongo que al ser la moto de pruebas debe estar bastante usada, tiene mucho empuje y a su vez es muy dosificable, la moto pide más al piloto, pero tampoco te exige una conducción de ir picándote hasta con las farolas, puedes hacer un poco de todo y eso me encanta.
También pregunte al caballero que me atendió, diferencias entre la black y la carbón, me comento que son exactamente iguales, la única diferencia que tienen es el material de carbono que sustituye a algunos plásticos e hizo especial inciso en las llantas que para él era lo más destacable, con lo cual reitero mi postura sobre que es mucho dinero por 4 kilos menos de peso para la Diavel, los cuales puedo ganar simplemente cambiando el tubo por menos de ese precio de diferencia entre versiones, poniendo por ejemplo el Zard que vi en este mismo foro que reduce ese peso en 4 kilos y además queda mucho más bonito.
Comentemos brevemente colores y demás y coincido con el chico que habiendo visto la carbón y la black, esta moto está hecha para ser negra total, bajo mi punto de vista claro está.
La Diavel me ha convencido y aunque tenga que esperar un poco más para poder tenerla la espera valdrá mucho la pena, espero poder pasar por ducati corver y me la dejen otro día para poder explayarme un poco más con la prueba.
Pues hasta aquí la crónica, ¡espero os haya gustado! Gracias por leerme y por decirme donde poder probarla!