I DESMORIOJANA & TRIUMPH
Este fin de semana hemos logrado realizar la primera concentracion seria de Ducati & Triumph en nuestras tierras.
El sábado por la mañana amanecía un día frío, entre nubes, y con las carreteras mojadas. Por delante nos esperaban 500 km de curvas repartidos en varias etapas, tanto el sábado como el Domingo.
Gente de Zaragoza, de Pamplona, más los de casa, bien abrigados y pertrechados ensillábamos nuestras monturas para ponernos en marcha.
La ruta empezaba en Logroño, con destino al circuito de los Arcos donde contactaríamos con Dani y Toño. Cruzamos “mataburros” a ritmo tranquilo. El suelo un pelín mojado, las vueltas, trazadas en esta ocasion con suavidad, nos permitia notar el viento frio que se colaba por nuestros cascos. No había prisa. Sabíamos que había “tema” por delante.
Café en los Arcos, presentaciones, y ritmo nuevamente hasta el Villar de Arnedo.
POco a poco el ritmo aumentaba. Después, El Redal, Murillo, Villamediana donde teníamos el primer punto de reunión. Nos dejamos a un lado un grupo de Buitres leonados, mirandonos a 50 m sin asustarse. UN publico muy especial.
A las 12.00 salíamos para subir por los cameros hasta Villoslada. Además se unían al grupo las chicas. Que como dos valientes aguantaron una etapa de las mas duritas que se pueden hacer en nuestra tierra.
LA subida de Soto, nos metió en carretera de puerto. Desde ahi hasta la subida del Muro en Cameros y el alto de la Rasa de 1400 m, sencillamente precioso,
Según subiamos, se veía el alto entre nubes. Y asi fue como lo cruzamos. Niebla y agua-nieve. El frio aumentaba. Las manos agarrotadas… pero la vista…, de película.
La bajada muy prudente, por carretera con mal asfalto.
Alguno se cagó en la madre que parió a una oveja, que despues de oir el ruido de los termignoni, y los escapes libres de las Triumph, decidió cruzarse cuando menos se la esperaba… sin consecuencias.
Despues la subida a Villoslada por la carretera de SOria. La gente tenía ganas de moto, así que decidimos alargar hasta la Venta del Piqueras. Aquí ya la gente tuvo ocasion de quitar la carbonilla a la moto. Y el ritmo fue “maricon el último”…
La comida en EL Corona no podia ser otra que patatas, caparrones y cabrito asado. Sencillamente estupenda.
Con las barrigas llenas, costaba un poco más la bajada, pero no quedaba más remedio que irnos para ir en busca de nuestros compañeros Ducatistas.
Cruzamos por Sojuela, Sorzano, Daroca. Buen asfalto. Más vueltas.
Era una maravilla mirar por el espejo retrovisor y ver el baile de luces a un lado y a otro de las motos, al son de las curvas. El grupo iba aumentando, a medida que aumentaban los km.
Llegamos hasta Najera nuestro punto de reunión con nuestros amigos maños.
Cafe. Gasolina. Al rato una llamada de nuestros amigos. Habia que ir a buscarles a la plaza de Najera.
Alberto y Ana, con su ST2, Juan y Carmen con una Multi, y Olga con su monster . Habían tenido mal viaje. El cierzo les habia castigado duramente, y los que andamos en moto sabemos que eso es lo peor…
Fue una satisfación, oir alguna “pandereta” a parte de la mía, y es que los tiempos cambian, y en las nuevas ducati empieza a ser una excepcion.
Subimos rápido a las motos, y enfilamos camino de Tricio, Villaverde de Rioja y nos metimos otra vez a las faldas de la sierra de la Demanda, al pie de San Millan, cuna de nuestro Castellano. Más vueltas. Atardecer entre nubes y tractores vendimiando. Giratorios que se veían a km, cuando mirabas hacia el Valle como luces de un arbol de Navidad. Estampa de la Rioja en estas fechas. Tierra de vino.
Llegamos a Santo Domingo y ya casi al anochecer, rumbo Ezcaray, las gotas empezaron a aparecer. Vaya¡. Nos ibamos a calar a falta de 10 km. Pero se ve que San Cristobal, patron de los conductores decidió echar un capote al estilo de San Fermín… asi que libramos.
Llegamos a nuestro Hotel de Ezcaray. Hotel con encanto. Tipo borda de montaña. Aparcamos nuestras motos y despues de colocarnos en las habitaciones, y de dar algún susto a los clientes del Hotel (obra de DAni) bajamos a cenar.
La protagonista de nuestra cena… una tortilla de patata hecha al infierno, Como picaba la jodida¡¡¡. Alguno se acordará toda la vida¡¡¡¡¡
El ambiente inmejorable. risas risas y más risas. Coño¡¡¡¡ como puede ser si estabamos un grupo que apenas nos conocíamos, y mejor que una cena de íntimos amigos… esto de las motos es lo que tiene. BUEN ROLLO.¡¡¡¡
Tras las copas, empezo el torneo de Futbolín…
hasta las tantas… No hubo ganadores. Aunque si quedó claro que Alberto y yo estabamos entre los peores…
Al día siguiente los sonidos de los termis de los madrugadores me despertaban. Subían hasta la estación de squi de Valdezcaray, pero la mala suerto quiso que estuviera en obras y no les dejaran cruzar.
Al final sólo lograron pulverizar sobre sus preciosas máquinas, como si las hubieran rociado con un spray, escrementos de vaca… cosas de esta zona…
A las 11 saliamos para hacer la ruta de la mañana. Aunque la del Domingo … fue una ruta… gastronómica.
Parada en casa de Glera. Mecánico de Derbi. Referencia motera obligada de la zona. Chorizo, tomate y vino. Contactamos con los triufitos, y ya las 17 motos, nos fuimos hasta Valdelana para visitar la bodega.
Desde aqui gracias a Juanje (su dueño y a Ana) por invitarnos a la visita, y a una cata magnífica de un Crianza estupendo, y para acompañar, como no…más chorizo y queso.
Como íbamos a comer con el aperitivo que nos habíamos metido???
A las 2 subíamos hacia Rivas de Tereso a comer en el Jose Mari… una chuletada de impresión. Café y fin de fiesta. Despedida y cierre.
Un fin de semana de motos, buenas carreteras, curvas, buena comida de nuestra tierra y mucha mejor compañía del grupo que nos juntamos.
Magnifico recuerdo de nuestra primera DESMORIOJANA.
Magnifica recuerdo de la gente.
Seguro que no es la última.
, gracias por la crónica y las fotos 
