El domingo tuve el placer de salir a dar una vuelta mañanera con la maquina. zona de la IGLESUELA
Mis primeras sensaciones son claras:
Me tengo que adaptar al tipo de motor, ya que vengo de un 4 cilindros y me gusta ir algo bajo de vueltas, he visto que el régimen de vueltas en este tipo de motores oscila entre las 3.500 hacia arriba y eso el otro día me penalizo en algunos momentos.
La salida de la curva, en el momento de abrir gas es algo brusca, vi que hay que ir casi abriendo antes de tomarla para evitar el tirón y llevarse algún susto.
Hecho en falta el indicador de marcha, cuando te acostumbras al apara-tillo ya no quieres volver hacia atrás.
Gran comodidad de posición y de asiento. algo doloridas las muñecas y la mano del embrague, pero eso creo que saliendo mas a menudo se quita, llevo todo el invierno fuera de juego.
Si decir que la frenada de delante vibra bastante, posiblemente los discos están alabeados. ¿alguna tienda de recambio online o por la zona centro con las tres B.
Motor: después de unos 1.500 km ya le voy cogiendo el hilo de las revoluciones correctas para el buen funcionamiento del motor. Ademas penaliza mucho no ir en la marcha adecuada.
Es cierto que cambian cosillas como las que has ido mencionando.
Evidentemente es cuestión sobre todo de hacer kilómetros y seguir atento a las nuevas sensaciones.
La mano poco a poco ya se irá acostumbrando, no te preocupes, y así pasará con casi todo.
Yo por ejemplo, que nunca he llevado indicador de marchas, mis referencias son tanto el marcador de velocidad como el de revoluciones pero sobre todo el oído.
Es cuestión de adaptarse.
En cuanto a las 3.500rpm que mencionas pues sí, a partir de ahí es cuando quizás se obtenga una mejor respuesta pero vamos, que sobre todo con una conducción turismo donde no procede forzar ni máquina ni ritmo, las ducati funcionan especialmente bien en los bajos.
