Bueno, al ser nuevo, no conoceros y no tener Ducati pensaréis ¿de qué coño va a hablar este fulano? pues voy a contaros someramente el día que me enamoré, el día que me robaron el corazon, en definitiva: el día que cogí una Ducati. 8)
Situación: mañana de sábado no demasiado propicia para rutear (había nubes) y con una compañía un tanto extraña: un chico al que no conozco de nada con una especie de transantlantico llamado Yamaha FJR 1300 y un coleguilla que lleva una cafetera italiana, concretamente una 749 S que además de ser Ducati la lleva totalmente personalizada (pinturitas y cosas así)…vamos que parecíamos el trío calavera y para colmo el día no pintaba muy allá.
Esta parte la resumiré bastante para no aburrir al personal: Enfilamos el puerto de Galapagar, Cruz Verde, comida en Ávila y planeamos el regreso a la Cruz verde…
…y e aquí que mi amigo (Madmardigan), el dueño de la cosa esa roja que suena rara, rara, rara me dice “Marmota lleva si quieres la Ducati para que la pruebes”. Tengo por costumbre no coger ningún vehículo de ningún amigo por lo que pueda pasar pero este me debía una vuelta en su artefacto por una historia que no viene al caso…el tema: Yo me encomendé a Dios y al Diablo para que mientras yo llevase esa especie de moto con escape de SEAT 127 no se jodiera mientras estuviera bajo mis posaderas…y me monté encima.
Algo empezaba a ir mal, pensé por un segundo en decirle a mi amigo el ducatero que los de la fábrica de la moto se les había olvidado poner el asiento, pero para no preocuparle me callé.
Y así empeza mi peregrinaje, pensando en cómo alguien podría querer comprarse aquel potro de tortura (y dicen que la 749 está más civilizada y ergonómicamente estudiada!!!)…y además con lo que cuesta!!!
Llevaba los primeros 500 metros sobre la Duca cuando, despues de haber echado en falta el asiento, eché en falta algo si cabe más importante…dispuesto a adelantar a un enlatado busco con la mirada el retrovisor izquierdo para ver si viene alguien adelantando en ese momento…lo busco, lo busco otra vez…lo sigo buscando…y no lo encuentro!! Esta moto está sin terminar!!!
Bueno, ante lo desesperado de mi situación con aquella extraña máquina que nada tenía que ver con mi maravillosa Kawasaki perfectamente ergonómica, perfectamente rápida y muy bonita decidí llegar pronto a la Cruz Verde y terminar con el suplicio de llevar aquella moto que en tan solo dos kilómetros había conseguido que se me durmieran las manos, que fuera nervioso por no tener retrovisores (si, si que los tenía, los vi al bajarme de la moto) y que para colmo estaba terminando de destrozar mi incipiente almorrana culera con aquella especie de esponjilla que no merece ni siquiera ese nombre…
…y rosqué el acelerador…
vaya, pues parece que corre algo este trasto,…par motor tiene, eso si, como tracciona, con lo que me gusta a mi abrir el gas todavía plegado, que bien responde al gas en curva…
Ya iba a una velocidad totalmente ilegal cuando me percaté de que la curva perfectamente peraltada a izquierdas que hay despues de la pequeña recta en bajada y antes de llegar a los molinos de viento se me echaba encima…y tumbé.
Normalmente en esa curva y por hacer un poco el ganso suelo forzar la situación mía sobre la moto sin tumbar demasiado ésta y así rasco rodilla por el mero hecho de hacerlo, sin que sea para nada necesario…solo por que me gusta…pero con la Duca tumbé, y tumbé, y tumbé…hasta que apareció en mis ojos un brillo y en mi boca una sonrisa que me hizo, de golpe, entender que alguien como el “caprichitos” de mi amigo Madmardigan se gastara los 15000 euros que cuesta su Ducati 749 S amén de todas las pijadas que le lleva puesta,…
¿Qué como termino el viaje? pues con el Marmota marcando pole en el trayecto Ávila-Cruz Verde con una moto que no solo era la primera Ducati que cogía en su vida, sino que era la primera bicilíndrica! y yo no soy ningún crack precisamente en esto de las motos…
Y lo importante no es lo rápido que fuera o dejara de ir con aquella moto, lo importante es que todo me salía más facil, más suelto, más bonito…
La moto no anda de la hostia, retiene demasiado al soltar gas, no estira a partir de las 10.000 rpm…pero solo por la forma de trazar las curvas qeu tiene y por su chasis me enamoró. Y será mi próxima moto.
Eso, eso, eso es todo amigos